Actualmente, más de 500 millones de personas padecen rinitis alérgica. Para aquellos pacientes que sufren sus insistentes y desagradables síntomas, esta enfermedad supone un verdadero motivo de incomodidad y desesperación.

La rinitis alérgica es una patología crónica que puede tener diferentes orígenes y tratarse de múltiples formas. Si la sufres, lo más recomendable es que acudas a un especialista en otorrinolaringología con experiencia y una trayectoria consolidada, como el Doctor Galindo, que te indicará cómo curar la rinitis alérgica de forma efectiva.

¿Quieres saber más sobre los síntomas de la rinitis y su tratamiento? En este artículo te explicamos todos los detalles sobre esta afección tan común.

¿Qué es la rinitis alérgica?

La rinitis alérgica es una enfermedad crónica producida por la inflamación de la mucosa nasal, que a su vez es provocada por una reacción de nuestras inmunoglobulinas ante la presencia de agentes alérgenos de diversa procedencia, como pólenes, ácaros, hongos, epitelio de animales, alimentos, medicamentos y ocupacionales.

Esas inmunoglobulinas son las proteínas o anticuerpos que están presentes en nuestros sistemas inmunológicos. Estas, cuando se encuentran con un alérgeno, producen una respuesta inmunológica aberrante e innecesaria.

Esta reacción ocurre en 2 etapas:

• La 1ª etapa puede transcurrir en días, semanas, meses y hasta años antes de la aparición de los síntomas. Consiste en la sensibilización del paciente al agente externo llamado alérgeno.
• La 2ª etapa ocurre en un siguiente contacto con el agente que produce la alergia. Es justo en esta fase cuando se manifiesta la rinitis alérgica y sus síntomas.

Síntomas de la rinitis alérgica

Los síntomas de la rinitis alérgica pueden ser muy variados. Por lo general, los más comunes suelen ser:

• Prurito nasal: Consiste en una picazón exagerada en la nariz que se da como respuesta a la presencia del agente alérgeno en el organismo, ya sea el polvo, el polen o los ácaros, entre otros. El prurito nasal también puede sobrevenir con el consumo de alimentos o medicamentos que producen hipersensibilidad. Quizás ese picor se extienda también hasta tu garganta, faringe y oídos.
• Estornudos: La expulsión violenta de aire de los pulmones a través de la nariz y la boca, que todos conocemos como estornudo, es otra de las reacciones orgánicas más habituales ante la presencia del agente alérgeno que irrita las membranas mucosas.
• Rinorrea acuosa: Se trata del conocido goteo nasal que se forma ante el exceso de líquido que la inflamación de la mucosa nasal produce en la parte interna de nuestra nariz. Generalmente, la rinorrea es muy líquida y transparente.
• Congestión nasal: Se da cuando los tejidos que recubren el interior de tu nariz se inflaman y los vasos sanguíneos se hinchan, como reacción a la presencia del objeto extraño o agente alérgeno en la zona nasal.
• Cansancio: Rinitis alérgica y cansancio van muchas veces de la mano, como sucede con los resfriados.

Dada la correlación de la rinitis alérgica con otros órganos, como los ojos y los oídos, a veces pueden manifestarse otros síntomas asociados a la sinusitis alérgica, como la rinosinusitis crónica polipoidea, la conjuntivitis o la otitis. Además, esta enfermedad puede ser la base de otras patologías más complicadas, como, por ejemplo, la aparición de asma.

Diferencias entre catarro y rinitis alérgica

El catarro y la rinitis alérgica son dos enfermedades distintas, pero manifiestan prácticamente los mismos síntomas. Aún así, existen varias diferencias a destacar:

• Síntomas. El catarro va acompañado frecuentemente de tos y dolor de garganta, y a veces también de fiebre, molestias y dolores generales. Ahora bien, quien padece de rinitis alérgica, rara vez sufre de estos síntomas. Por su parte, entre las manifestaciones más habituales de la rinitis está la picazón en los ojos.
• Causas. También se perciben diferencias en cuanto a las causas de cada enfermedad: mientras el catarro es producido por un virus, la rinitis alérgica surge a causa de la exposición a alérgenos.
• Duración. El catarro puede ser menos estacionario, ya que suele durar 5, 7 o 14 días. En cambio, la rinitis alérgica puede durar varias semanas y se alivia por momentos.
• Tratamiento. Por un lado, el catarro se va curando con ayuda de medicamentos de venta libre para el resfriado, como descongestionantes. Y, por otro, el tratamiento de la rinitis alérgica se afronta con antihistamínicos, atomizadores nasales de esteroides y descongestionantes y, en algunos casos extremos, se puede aplicar cirugía.

Cómo tratar la rinitis alérgica. Tratamientos

Entonces, ¿cómo curar la rinitis alérgica? Aunque se trata de una enfermedad crónica, se pueden tomar medidas para prevenir la alergia y evitar el contacto con alérgenos, o bien optar por otros tratamientos farmacológicos y también quirúrgicos.

1. Tratamiento preventivo o de evitación

El tratamiento de la alergia de la rinitis busca precisamente evitar que el agente que causa la alergia ingrese en el organismo.

Las medidas de un tratamiento preventivo o de evitación son más bien recomendaciones y no siempre resultan efectivas, pues eliminar un agente o mantenerlo alejado de nuestro entorno no es tan fácil.

Estos consejos preventivos pueden ser de evitación ambiental, como la limpieza y uso de mecanismos para proteger el ambiente de la presencia de alérgenos, y también lavados nasales con suero fisiológico o agua de mar, para arrastrar la mucosidad y el alérgeno.

2. Tratamiento farmacológico

Para mejorar los síntomas de la rinitis alérgica también se puede optar por la administración de ciertos medicamentos, como por ejemplo:

• Antihistamínicos orales: Alivian la rinorrea, los estornudos, el picor nasal y el ocular, pero tienen poca incidencia en la obstrucción nasal. Son indicados para la rinitis alérgica persistente moderada-grave.
• Corticosteroides tópicos intranasales: Suavizan todos los síntomas de la rinitis, incluida la congestión nasal y los problemas oculares. También son una alternativa idónea para la rinitis alérgica moderada-grave.
• Antileucotrienos: Pueden contribuir a mejorar los síntomas, pero no a eliminarlos: la eficacia de los antileucotrienos es moderada. Cuando la rinitis alérgica va acompañada de un cuadro de asma, estos medicamentos pueden ayudar a suavizar ambas patologías.
• Cromonas tópicas: Ayudan a reducir los estornudos, la rinorrea y la congestión nasal, aunque su eficacia en el tratamiento de rinitis alérgica es moderada.

3. Inmunoterapia

A la pregunta de cómo curar la rinitis alérgica, otra opción viable es la inmunoterapia. Esta se puede administrar vía oral o subcutánea, en cantidades que deben dosificarse de acuerdo con los alérgenos crecientes.

Eso sí, antes se debe indagar muy bien acerca del origen de la enfermedad, es decir, sobre cuál es la causa de la rinitis alérgica.

La inmunoterapia está indicada en rinitis alérgica intermitente moderada-grave y también en rinitis persistente.

4. Tratamiento quirúrgico

En caso de que la rinitis se vuelva refractaria al tratamiento médico, tendrás que valorar la posibilidad de recurrir a la cirugía para reducir la obstrucción nasal o la rinorrea. Un procedimiento que recaerá principalmente a nivel de los cornetes inferiores y el tabique nasal.

Posiblemente, la cirugía no pueda curar la rinitis al 100%, pero sí aumentar la permeabilidad de la cavidad nasal y reducir los efectos de la mucosa edematosa. Si quieres recibir un tratamiento adecuado para la alergia de tu rinitis, puedes pedir asesoramiento en la clínica del Doctor Galindo.

En nuestro equipo somos conscientes de la dificultad de sobrellevar los síntomas de la rinitis alérgica y el cansancio que provoca esta enfermedad, por eso estamos a tu disposición para ayudarte. No esperes más y ponte en manos de profesionales: pide ya tu cita con el Doctor.

Artículos relacionados