Rinoplastia Ultrasónica

¿Qué es la rinoplastia ultrasónica?

La rinoplastia ultrasónica es aquella en la que utilizamos el instrumental piezoeléctrico para remodelar los huesos nasales. En contra de la creencia más extendida, la rinoplastia ultrasónica no es una técnica de rinoplastia completa ni una filosofía nueva. Únicamente se trata de utilizar este instrumento para un paso muy concreto de la rinoplastia, que es el remodelado de los huesos nasales. En la punta de la nariz, el tabique o la zona central del dorso no tiene ninguna aplicación. 

El Dr. Javier Galindo es pionero en España en rinoplastia ultrasónica y ha introducido a innumerables colegas en su uso a través de sus cursos.

Cómo funciona el instrumental ultrasónico

El equipo de ultrasonidos funciona convirtiendo la energía eléctrica en vibración, que se transmite a la punta del instrumento para realizar distintas maniobras. Así, mediante rinoplastia ultrasónica podemos limar, remodelar y cortar los huesos de la nariz para darles la forma deseada.

La alternativa clásica a la rinoplastia ultrasónica es el uso de cinceles (osteotomos) y un pequeño martillo. En la actualidad este método está muy demonizado, pero en opinión del Dr. Javier Galindo aún tiene sus aplicaciones, y en ningún caso se trata de una técnica agresiva. Disponer de todos los recursos disponibles y estar abierto a nuevas tecnologías garantiza que para cada paciente se utilicen los instrumentos más adecuado.

Ventajas de la rinoplastia ultrasónica

La rinoplastia ultrasónica presenta algunas ventajas sobre otras técnicas de remodelado óseo como son:

  • Alta precisión: el corte y el limado del hueso son muy precisos, pudiendo delinear perfectamente donde el hueso nasal cederá ante la mínima presión para alcanzar la forma deseada.
  • Delicadeza: el instrumental ultrasónico sólo trabaja sobre el hueso, siendo inocuo para los tejidos blandos, como la piel, los vasos sanguíneos o el recubrimiento los huesos (periostio), por lo que no se producen daños sobre ellos. Esto proporciona un postoperatorio sin apenas edemas ni hematomas en la cara.
  • Versatilidad: dependiendo del inserto que coloquemos en la punta del instrumento ultrasónico, el terminal puede cortar, limar, hacer agujeros o “rascar” sobre los huesos nasales. En casos de rinoplastia secundaria, en donde los huesos suelen estar muy dañados por la cirugía previa, el remodelado por ultrasonidos es especialmente ventajoso.

Inconvenientes de la rinoplastia ultrasónica

Como todas las tecnologías, la rinoplastia ultrasónica presenta algunos inconvenientes, entre los que destacan:

  • Dificultad de uso: ningún instrumento trabaja solo, por lo que es vital que el cirujano tenga experiencia en su uso y lo domine. De otro modo se pueden producir importantes complicaciones como quemaduras en la piel o cortes imprecisos.
  • Disección extendida: el ultrasonido solo hace efecto sobre el hueso desnudo, por lo que en esta cirugía hay que elevar la piel de la nariz hasta su unión con la cara. Esto ocasiona cierta hinchazón en la vista de frente durante unas semanas.
  • Tamaño del instrumento: comparado con un pequeño cincel de 2 milímetros, la pieza de mano ultrasónica es muy voluminosa (más o menos como un destornillador eléctrico). En mi experiencia su uso prácticamente obliga a realizar un abordaje abierto para poder disfrutar de todas sus ventajas. Es por ello que cuando la prioridad es hacer una cirugía sin incisiones visibles los osteotomos de 2 milímetros siguen siendo de elección.
  • Precio: esta tecnología es mucho más cara que sus alternativas. Si bien esto puede ser un inconveniente, las ventajas para sus pacientes hacen que el Dr. Galindo no tenga en cuenta este aspecto a la hora de recomendar su uso.

Opinión del Dr. Javier Galindo

La rinoplastia ultrasónica es una tecnología muy útil en rinoplastia, pero solo sirve para remodelar los huesos. Su buen uso requiere un gran entrenamiento y un cirujano experimentado. Es muy preciso y delicado con la piel, por lo que el postoperatorio tiende a ser más rápido y cómodo para el paciente. Presenta algunos inconvenientes menores que no evitan que el Dr. Javier Galindo lo utilice en casi el 100% de sus rinoplastias. 

Como ocurre con todas las tecnologías aplicadas a la medicina y la cirugía, hay momentos en que la novedad tiende a exagerar sus bondades. El Dr. Galindo siempre recomienda que la prioridad sea la elección de un buen profesional, que domine todas las técnicas y disponga de todos los recursos materiales para ofrecer a sus pacientes el mejor tratamiento para su caso.

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