Antes y después de la otoplastia u operación de orejas
oLa operación de orejas u otoplastia es una cirugía que cuenta con cierta demanda dentro de los pacientes y es que algunas personas no se sienten completamente cómodas con la forma o el tamaño de sus orejas.
¿En qué consiste la operación de orejas?
Tanto los hombres como las mujeres tienen defectos que a su vez los hacen únicos, diferentes e imperfectamente perfectos, pero muchos de ellos deciden corregir estos para tener resultados que estén acorde con el resto de su rostro. Las cirugías de orejas suelen ser realizadas para aquellas personas que busquen reducir o aumentar el tamaño o simplemente darle una mejor forma a la oreja. Estas deformaciones pueden ser causadas por algo genético o simplemente por mal desarrollo en la o las orejas.
La otoplastia, generalmente no es una operación de bajo riesgo para el paciente, debido a que solo se busca reducir y darle forma a la oreja sin tocar otras zonas. Además, se puede lograr que las orejas queden más pegadas a la cabeza, eliminando así las populares y molestas “orejas de duende”. La otoplastia puede ser empleada en niños de 6 a 14 años, ya que a partir de los 6 años la oreja ya está desarrollada por completo y es más rápido el proceso de reconstrucción. Sin embargo, si la persona es adulta también puede acudir a esta tipo de cirugía sin correr ningún tipo de riesgo por la edad.
Antes y después de la otoplastia
Antes de que la persona sea apta para realizarse la cirugía, debe seguir una serie de pasos para poder estar totalmente preparado para ella. Antes de la cirugía debe:
1. Utilizar jabones germicidas. El uso de este tipo de jabones reducen las bacterias y las infecciones que puedan afectar la operación a la hora de realizarla. Además debe de lavar el cuerpo, cara y cabeza con el jabón germicida para mayor efectividad.
2.No utilizar ningún tipo de medicamento, antes de dos semanas de la operación y dos semanas después de ella.
3. No fumar, se recomienda no hacerlo las tres semanas previas a la cirugía y otras tres después esta.
Después de que el paciente haya superado la cirugía, se recomienda seguir al pie de la letra todas las indicaciones dadas por el médico cirujano, para garantizar que se tenga una total recuperación. Entre los principales puntos a tomar en cuenta, podemos encontrar:
1. Tapar por completo la zona donde se realizó la cirugía, ya que es una zona que esta sensible al tacto las primeras 24 horas. Al tercer día se puede tapar las orejas de manera más liviana usando gasas durante aproximadamente tres semanas.
2. Las suturas de la operación se pueden retirar entre el quinto y el séptimo día. Esto va a depender de la evolución que tenga la herida y su proceso de cicatrización.
3. Si no se observa hinchazón en las orejas, esto es signo de una evolución satisfactoria, aunque el resultado final se verá de forma clara a los tres meses. Algo muy importante y que no puede descuidarse es tener bajo control y supervisión la zona de las orejas , para evitar que puedan acumular líquidos en los tejidos o en las heridas, lo cual puede ser perjudicial para el paciente e incluso poner en riesgo el éxito de la cirugía.
4. Durante el cuidado de la operación, el paciente debe de tener precaución a la hora de realizar su aseo personal, porque es importante que no le caigan ningún tipo de producto con olor para evitar la irritación y tiene que lavar las cicatrices solo con agua y jabón neutro.
5. Se debe evitar dormir de lado, por lo que es recomendable dormir boca arriba para proteger a las orejas del roce con la cama o almohadas. Puedes utilizar cualquier crema que sea especializada para este tipo de operaciones. También se recomienda masajear de forma suave y controlada en las orejas para aliviar el dolor y la inflamación.
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