Lifting sin cirugia facial: tratamientos y resultados
El lifting sin cirugía consiste en un procedimiento estético y no quirúrgico que se encarga de rejuvenecer el rostro sin necesidad de pasar por quirófano.
Lifting: ¿con o sin cirugía?
Hay que tener en cuenta que tanto el lifting con cirugía como sin cirugía no cuentan con los mismos resultados para combatir los efectos del paso de los años en el rostro. No obstante, muchos pacientes prefieren los procedimientos menos invasivos, pero que a su vez sigan siendo muy versátiles y eficaces, como es el caso de lifting sin cirugía.
De esta forma, debemos de tener en cuenta que para cualquier resultado de rejuvenecimiento es necesario tratar diferentes planos: volumen, elevación y arrugas por lo que lo ideal es llevar a cabo diferentes técnicas en conjunto.
¿Qué tratamientos hacer para el lifting sin cirugía facial?
Como hemos dicho anteriormente, para un resultado óptimo lo ideal es combinar tratamientos que ataquen el volumen y la elevación la piel, así como la eliminación de arrugas:
- Hilos tensores: Se trata de hilos sintéticos que se colocan bajo la piel de forma que se consigue una piel más tersa.
- Láser e IPL: Su objetivo es eliminar las arrugas más superficiales y mejorar las más profundas así como se encargan de eliminar las manchas solares y conseguir una piel más luminosa y tersa.
- Mesoterapia con factores de crecimiento: A través de la sangre del propio paciente, la cual es procesada para concentrar sustancias que favorezcan la estimulación de la piel, se mejoran notablemente las características de la piel del rostro.
- Rellenos faciales: Aportan volumen al rostro consiguiendo la armonía facial
¿Cuáles son las ventajas del lifting sin cirugía?
- Evitas el postoperatorio tras cualquier cirugía
- Puedes continuar con tu vida normal y sin bajas médicas
- Las consultas para llevar a cabo estos tratamientos son muy cortos (de 30 a 120 minutos)
- Mejoran la calidad de la piel, al contrario del lifting con cirugía
¿Qué tener en cuenta al elegir un especialista?
Es importante que el especialista que te vaya a realizar el tratamiento sea también quien te haga el diagnóstico previo así como el seguimiento.
Aléjate de vendehumos y comerciales, ponte en manos de un médico especialista y acreditado.
Es importante que leas detenidamente los consentimientos así como los efectos secundarios, que aunque son poco frecuentes, es importante conocerlos.
Busca un centro estético médico que esté autorizado y al que puedas reclamar ante cualquier incidencia.
Y tú, ¿qué tipo de lifting prefieres?